En la Sierra de San Miguelito, fraccionamientos no: SEMARNAT (Video)

diciembre 28, 2021
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Segunda parte de la entrevista con María Luisa Albores González, Secretaria de Medio Ambiente
“El que manda es el decreto, entonces no se va a permitir más desarrollo inmobiliario”, dijo

Por Victoriano Martínez

Tras declarar Área Natural Protegida la Sierra de San Miguelito (ANPSSM), la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (SEMARNAT) prevé presiones por parte de los empresarios inmobiliarios, por lo que iniciará jornadas de información para contrarrestarlas y estableció una línea firme: no se permitirán fraccionamientos ni proyectos inmobiliarios en la nueva ANPSSM.

María Luisa Albores González, titular de SEMARNAT, dijo que a partir de la publicación del decreto que declara Área Natural Protegida con carácter de área de protección de flora y fauna 111 mil 160.44 hectáreas de la Sierra de San Miguelito lo que rige en ese territorio es lo que ahí se establece, entre lo que prohíbe cambios de uso de suelo y establecer áreas habitadas o urbanizadas.

“Esto sí lo dejamos muy claro: no se autorizará la fundación de nuevos centros de población y tampoco de nuevos espacios urbanos. ¿Qué queremos decir con eso? Pues no a los fraccionamientos, no a las plazas comerciales, dentro de esta área que su función tiene que ver con una función directamente ambiental”, advirtió.

Desde que el 24 de mayo de 2019 inició el proceso para la declaratoria de ANP para la Sierra de San Miguelito se dieron presiones empresariales para que en la definición del polígono del área a proteger se dejaran fuera grandes extensiones para proyectos inmobiliarios, entre los que sobresalen Gran Peñón y Las Cañadas.

Albores González describió ese tipo de presiones como el manejo de componendas políticas, así como presiones que se ejercían sobre los comisariados ejidales, “el dinero que se movía, donde en algún momento algunos y algunas se veían favorecidas, porque no todos”.

El alcance de las presiones de los empresarios inmobiliarios llegó al extremo de lograr que un funcionario de la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas emitiera un acuerdo para excluir del área de protección mil 805 hectáreas que la Comunidad de San Juan de Guadalupe tenía comprometidas para el proyecto Las Cañadas.

Lograda esa exclusión, la presión de los empresarios alcanzó a colar un artículo transitorio en el proyecto de decreto para mantener fuera esas mil 805 hectáreas. Finalmente, ante la presión de activistas y la agrupación Guardianes de la Sierra de San Miguelito, en una revisión final se estableció que el oficio de exclusión fue emitido por un funcionario que no tenía facultades para hacerlo.

La titular de SEMARNAT reconoció que hay funcionarios de la SEMARNAT que mantienen esquemas de trabajo que pueden ser aprovechados por los desarrolladores inmobiliarios, como ocurrió con el caso de las mil 805 hectáreas que se intentó excluir, y que ahora podrían obstaculizar los trabajos de información y elaboración con las comunidades del plan de manejo.

“Si hay que limpiar la institución, pues hay que empezar a limpiar la institución. Fortalecer también la institución, fortalecerla y la mejor manera es a través del servicio directamente al pueblo”, expresó.

Albores González explicó que se buscará la construcción del plan de manejo de la ANPSSM no sólo con la participación de las instituciones, sino que se trabajará directamente con la gente a través de programas instrumentados por el gobierno federal para hacer funcional la nueva área natural protegida.

“Que vaya teniendo una funcionalidad orgánica directamente con quienes viven en estos espacios y no los que llegan y que quieren hacer una presión porque lo que les interesa es la compra del suelo pero para cambiar el uso de suelo que se tiene”, dijo.

En el caso del proyecto Las Cañadas, la presión empresarial inmobiliaria logró que en los programas municipales de desarrollo urbano aprobados por el Cabildo 2018-2021 se establecieran como áreas urbanizables 475 hectáreas que finalmente también se incluyeron como parte de la ANPSSM, por lo que ni en esa zona se podrá urbanizar.

La titular de SEMARNAT explicó que intentar un proyecto inmobiliario en casos como ese se tiene que someter a la aprobación de una manifestación de impacto ambiental ante esa secretaría que está obligada a hacer valer lo que se permite y no se permite en el decreto de la ANPSSM.

“Lo que no se permite, y no se va a permitir, son fraccionamientos o cuestiones inmobiliarias. El suelo no da para eso y tampoco el agua les da para eso. Entonces recordar que también esta Secretaría es la encargada de hacer la revisión de manifiestos de impacto ambiental”, dijo.

“Se los aclaramos: en un Área Natural Protegida el que manda es el decreto, qué si se permite y qué no se permite, entonces no se va a permitir más fraccionamientos, más desarrollo inmobiliario”, agregó.