María Estela Ambriz Delgado
Las acciones del Plan Emergente de Abasto del Interapas, como la extracción y perforación de pozos, no son una solución a mediano plazo sino que “son una fórmula para acelerar el desastre”, afirmó el doctor Jonathan Abraham Quintero García, profesor de la Facultad del Hábitat de la UASLP y presidente del Consejo Hídrico Estatal.
El catedrático explicó que el problema más importante en materia de desabasto de agua en la zona metropolitana de San Luis Potosí se encuentra en el abatimiento de los acuíferos de la cuenca, pues de ahí se suministra del 75 al 80 por ciento de la población, por lo que es urgente voltear a ver la importancia y lo delicado que es el abatimiento y la extracción de agua de los pozos.
En este sentido, Quintero García expresó que es una pésima idea abrir más pozos aunque de momento pueda parecer como una medida emergente adecuada.
Sin embargo, al considerarlo a mediano y largo plazo resulta desastroso e insostenible, pues una de las justificaciones para construir la Presa El Realito era dejar de depender y de extraer agua al acuífero de San Luis, por lo que consideró inverosímil que ahora que no funciona el acueducto, la solución sea sacar agua de este.
Asimismo, el presidente del Consejo Hídrico consideró que las autoridades no pueden justificar la escasez del agua en que El Realito no funciona debido a que no es el centro del problema al abastecer a una mínima parte de toda la población, además de que están aspectos como el crecimiento de la ciudad, el acaparamiento del agua por parte de grupos que la comercializan, y una desigualdad tremenda.
“Mientras que un pequeño sector tiene agua todo el tiempo e incluso para mantener infraestructuras que podrían considerarse de lujo, como campos de golf, albercas, clubs deportivos y demás, hay sectores que tienen años, inclusive décadas, sin agua para necesidades básicas”.
Quintero García también destacó que el problema de la desigualdad en la distribución del vital líquido es “muy fuerte” y algo que no se pone en la mesa ni se visibiliza, por lo que es responsabilidad de cada uno de los integrantes del Consejo Hídrico Estatal discutirlo.
Aunque aclaró que desde su perspectiva como especialista no se debe menospreciar la problemática de El Realito.
“Sí se le tiene que dar un seguimiento, sobre todo legal, y sí tiene que haber sanciones para los responsables. Esto es claro porque ha implicado gastos para toda una sociedad, e implica corrupción, entre otros problemas sociales, económicos y culturales”.