Congreso del Estado y sumisión por la opacidad

Por Victoriano Martínez

Hoy cierra el segundo periodo ordinario de sesiones del Congreso del Estado y desde ayer miércoles los diputados fueron a “celebrarlo” con el gobernador Ricardo Gallardo Cardona.

Un encuentro más cercano a un acto de pleitesía a quien ven como su verdadero patrón, por el que renuncian gustosos a la representación popular que tienen.

“Hoy nos reunimos con las y los diputados locales por el fin del periodo ordinario de sesiones”, escribió en su página de Facebook Gallardo Cardona. “Estuvimos platicando sobre su labor en este tiempo, les agradezco su trabajo en busca de un mejor San Luis Potosí”.

Quizá en su papel de gobernador que representa a los potosinos, el agradecimiento no esté tan fuera de lugar. Lo que resulta un exceso tras las inequívocas muestras de sometimiento que han dado los diputados es que como representantes de uno de los tres poderes se le rindan de esa manera.

La existencia de tres poderes es para que se comporten como contrapesos.

¿Qué les agradece el gobernador? ¿Que sólo hayan sido capaces de desahogar una de cada tres iniciativas que recibieron, o que las iniciativas “urgentes” que él les envió se las aprobaron por la vía más rápida posible?

La aprobación de las licencias y las placas gratuitas marcaron el grado de sumisión del Poder Legislativo al Poder Ejecutivo como nunca.

¿Les agradece que como Legislatura se estrenaron con cumplirle el capricho de rendir protesta como gobernador en la Plaza de los Fundadores con una autorización del cambio de sede momentáneo del Poder Legislativo, sin cumplir con todos los requisitos del procedimiento legislativo?

“Estuvimos platicando sobre su labor en este tiempo”, escribió Gallardo Cardona.

¿Habrán hecho el recuento de los resultados del trabajo legislativo, principal actividad del Congreso del Estado?

José Luis Fernández Martínez, presidente de la Junta de Coordinación Política, ¿le habrá dicho que recibieron 409 iniciativas, que sólo 106 han declarado procedentes, 17 improcedentes, han archivado una, dado de baja otra, que en 12 casos el promovente se desistió… y mantienen 272 pendientes?

¿Gallardo Cardona acaso les habrá propuesto a los diputados una campaña propagandística para impresionar a la población con 106 iniciativas aprobadas, que representan el 25.9 por ciento de las que recibieron? Total, él presume con una costosa propaganda la atención que da con becas económicas a menos de un ridículo 3 por ciento de los adultos mayores.

Tras el aplazamiento de un día, ¿habrá servido ese encuentro para que Gallardo Cardona les diera línea a los diputados para inclinar la balanza a favor de uno de los 12 aspirantes a integrarse a la Comisión Estatal de Garantía de Acceso a la Información Pública?

La doble publicación del dictamen para la elección de comisionado de la CEGAIP en la Gaceta de ayer y en la de hoy es indicador de que las piezas se están moviendo de última hora.

Aunque el tono del dictamen apunta a que será electa una mujer, las versiones que circularon este miércoles es que el mandatario hizo consultas para saber si era posible que fuera hombre… y le dijeron que sí.

También se supo que una o uno de los aspirantes ya analiza la presentación de un juicio de amparo por deficiencias en el proceso.

El año pasado, un aspirante tramitó un amparo días antes de la sesión de la elección, con lo que logró suspender el proceso hasta la fecha. Desde entonces, José Alfredo Solís Ramírez, comisionado supernumerario, suple la vacante de un numerario.

De no llegar una suspensión de amparo antes de la elección prevista para hoy, el Congreso del Estado nombrará comisionado o comisionada, según la instrucción que posiblemente hayan recibido ya.

Si el amparo viene después, nada pasará. Existe el antecedente de María de la Luz Islas Moreno, cuyo nombramiento en 2008 fue impugnado vía amparo por otros participantes, sin que la designación se revirtiera.

Gallardo Cardona y los diputados “celebraron” el fin del segundo periodo ordinario de sesiones con un día de anticipación.

Hoy seguramente los diputados le prestarán un servicio más al mandatario: nombrarán a quien ocupe la titularidad de la CEGAIP a quien mejor le sirva a Gallardo Cardona para continuar con su ya legendaria política de opacidad extrema.

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